lunes, 31 de marzo de 2014

Colegio Santa Mónica. 3º de EP. Dulce arquitectura

Si la estructura es la parte encargada de que los edificios se mantengan en pie, encontraremos la estructura de las personas en su esqueleto y la de los árboles, en sus raíces, su tronco y sus ramas. La mayor diferencia entre personas y árboles en que éstos, en principio, no necesitan ir de un lado para otro, por lo que confían su estabilidad a unos elementos enterrados que les proporcionan equilibrio. De la misma manera, los edificios necesitan de raíces para sustentarse: unos cimientos que en ocasiones pueden ser tan altos como la propia edificación.

Así empieza la actividad en la que han participado 150 alumnos de 3 de Primaria del Colegio Santa Mónica. A partir de aquí, las pirámides, los templos griegos, los arcos romanos y los pabellones de estructura metálica nos sirven de guía para entender cómo se sostienen los edificios, para llegar a la conclusión de que, en el caso de las mallas, el triángulo es la forma geométrica más estable. Y obsesionados con dicha geometría (literalmente, nosotros mismos no podemos dejar de buscarlos en todos los lugares que visitamos), nos convertimos en Buckminster Fuller para construir una de sus cúpulas geodésicas... Que probablemente no lleguen al día siguiente, no por falta de estabilidad, sino por esa tentación golosa a la que muy pocos pueden resistirse.


No hay comentarios:

Publicar un comentario